El encapsulamiento de los implantes es una reacción normal del organismo a un elemento extraño (las prótesis mamarias). Es común que el cuerpo forme una cápsula alrededor de la prótesis, algo parecido a una cicatriz que rodea el implante, a la que llamamos cápsula periprotésica. Esta protege al organismo de complicaciones e infecciones.

No obstante, cuando esta cápsula se engrosa y comprime el implante mamario, se produce lo que se conoce como contractura capsular o encapsulamiento mamario. Como consecuencia, el pecho se deforma y se endurece. Pero, ¿se puede vivir con una prótesis encapsulada? En este artículo respondemos a esta y otras preguntas relacionadas con el encapsulamiento de los implantes.

Síntomas de una contractura capsular

La contractura capsular puede manifestarse en cualquier momento, ya sea durante los primeros meses tras someterse a la operación de implante o bien años más tarde, lo que indicaría un posible deterioro o rotura de la prótesis.

Algunos síntomas de una contractura capsular son el endurecimiento progresivo del pecho con la consecuente tracción de los tejidos circundantes. Esto provoca modificaciones en la forma y posición del pecho. La piel se tensa y la amplitud de movimiento puede reducirse.

¿Qué hacer si se produce una contractura capsular?

Para algunas pacientes, vivir con una prótesis encapsulada implica la presencia de dolor o malestar. Para identificar cuándo es preciso someterse a una operación quirúrgica con el objetivo de revertir esta situación, podemos fijarnos en los siguientes grados de encapsulamiento:

  • Grado I: Es la cápsula que debería formarse en condiciones normales. No requiere tratamiento.
  • Grado II: Tacto más firme pero con una forma del seno todavía normal o aceptable. Puede requerir tratamiento de tipo no quirúrgico si se detecta a tiempo.
  • Grado III: Tacto firme y una forma del seno no adecuada. Generalmente, requiere intervención quirúrgica.
  • Grado IV: Tacto muy duro, forma anormal del seno, y puede ser molesto o incluso doloroso. En este caso, es evidente la necesidad de intervenir quirúrgicamente.

Antiguamente, el tratamiento del grado II de encapsulamiento se basaba en masajear la zona de la prótesis. No obstante, existen dudas sobre la efectividad de los masajes para encapsulamiento de prótesis y los ejercicios para prótesis encapsulada. Aunque los estudios más recientes los desaconsejan, lo más indicado siempre es preguntar al especialista.

¿Cómo prevenir una contractura capsular?

A pesar de que no se puede garantizar completamente su prevención, hay varias medidas que pueden reducir el riesgo de encapsulamiento. Es clave elegir el tipo, tamaño y forma del implante adecuado según las características de cada paciente, así como optar por la colocación submuscular. Además, seguir las indicaciones del cirujano durante la recuperación es fundamental.

Gracias a la mejora en la formación de los cirujanos y a una mayor implicación de los pacientes, las contracturas capsulares son ahora menos frecuentes. Es crucial contar con un equipo médico que ofrezca un enfoque personalizado y garantice tratamientos seguros. Esto contribuye significativamente a reducir complicaciones y obtener mejores resultados.

Confía en DEX Cirugía

Como hemos visto, el encapsulamiento de la prótesis es un proceso normal y sano. Así, se puede vivir con una prótesis encapsulada siempre y cuando no se produzca una contractura capsular. En estos casos, se debe acudir al médico especialista para que valore el tratamiento más adecuado.

En DEX Cirugía contamos con un equipo de expertos en los que confiar para realizar una operación como el implante mamario, garantizando la máxima rigurosidad y seguridad. Nos esforzamos por garantizar tu comodidad y bienestar en todo momento. No dudes en ponerte en contacto con nosotros.